Imagen perteneciente a un fragmento de la pelicula "El Nombre de la Rosa".
A partir
de los fragmentos analizados, podemos realizar un paralelo entre la situación y
un proceso judicial que, con tintes que remiten a la novela “El Proceso”
de Franz Kafka, refiere a una justicia absoluta, inaccesible, oscurantista y
ritualista. Desde un primer momento, se intenta extraer una confesión del
imputado mediante un manifiesto caso de lo que en términos procesales y
siguiendo a Julio Maier, podría denominarse como coerción procesal.
En
efecto, consideramos que los fragmentos seleccionados muestran una evidente
vulneración a la presunción de inocencia, operativa en todo momento del proceso
penal. La monja, devenida en fiscal instructor y juez, aborda el conflicto con
un fuerte prejuicio, tanto objetivo como subjetivo no dudando en realizar al
acusado preguntas capciosas y con falsos contenidos. Se puede afirmar que de
este modo, no se observan contenidos básicos del Derecho Internacional de los
Derechos Humanos y Procesal Penal, en este caso positivizados en las Reglas
Mínimas de Mallorca, entre otros.
En lo
referente a los derechos del imputado, se encuentra violado el derecho de
defensa en juicio, el cual abarca un conjunto de garantías. A modo de ejemplo
podemos nombrar: - el imputado desconoce los cargos por los que se le acusa; -
desconoce las pruebas en su contra, viendo imposibilitado el ejercicio de su
defensa; - es tratado como un objeto de prueba (validando cualquier método para
la obtención de su confesión); - tampoco se respeta el principio in dubio pro
reo, al considerar cualquier indicio en contra del acusado.
Integrantes del grupo: Vidal Juliana, Lerici Matias y Arriarán Ignacio
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tu comentario será publicado después de que se apruebe. No nos mandes más de una vez el mismo comentario.